Reclamación de productos estructurados

Abogados especialistas en la reclamación de productos estructurados y bonos

¿Qué son los productos estructurados?

Los llamados estructurados bancario es un depósito donde se invierte una cantidad de dinero que se encuentra referenciado a lo que se denomina un activo subyacente, que puede ser un valor o una cesta de valores (por ejemplo, acciones, materias primas, índices…).

El principal riesgo de los depósitos estructurados radica precisamente en la volatilidad del activo subyacente. Pero además debemos añadir un riesgo más, y es que no podemos retirar o cancelar el producto estructurado cuando nosotros queramos, sino que existen unas ventanas de salida (pueden ser trimestrales, mensuales o por años), fijadas en el contrato, que será la fecha en la que se  observa la cotización de la cesta de activos, y según la valoración de ésta podrán ocurrir varios escenarios: que se cancele el producto obteniendo una rentabilidad que puede ser positiva o negativa.

Productos estructurados considerados productos de riesgo por la CNMV

Por los riesgos que contienen los productos estructurados no es de extrañar que la misma CNMV así como la legislación vigente (Ley de Mercado de Valores) los haya calificado como productos de alto riesgo y muy complejos. En concreto se refiere a ellos como derivados financieros por sus características y riesgos singulares.

Por ello, a las entidades financieras se les exige un plus de información a la hora de comercializar y vender a consumidores este tipo de productos, máxime en tiempos de bajo tipo de interés en que la rentabilidad de las entidades son muy bajas y los usuarios preguntan por otras opciones.

Comercialización masiva de estructurados y sentencias de nulidad de productos estructurados

En el contexto económico actual, para las entidades es casi imposible conseguir productos bancarios con rentabilidades atractivas, por lo que éstas han optado por la comercialización de productos de elevado riesgo y que pueden comportar pérdidas superiores al capital invertido.

 

La categoría de derivado financiero de los productos estructurados obliga a las entidades bancarias a tener que extremar sus deberes en la obligación de cerciorarse de que el consumidor o inversor dispone de toda la información completa y detallada sobre el producto a contratar.

Es decir, el consumidor debe de poder decidir si está dispuesto a que exista la posibilidad de perder parte de su capital invertido.

 

Este detalle de información de riesgos en muchas ocasiones no se ha dado, lo que posibilita y legitima una reclamación de nulidad del contrato de estructurado frente a la entidad bancaria, por no cumplir con sus obligaciones.

En muchas ocasiones se ha aprovechado  de la confianza de clientes de toda la vida de la entidad para poder colocar estos productos a consumidores que no tienen un perfil de riesgo en sus inversiones, afirmándose en todo momento que su dinero no corría ningún riesgo.

 

En Artalex contamos con abogados especialistas en derecho bancario y en concreto en la defensa judicial de procedimientos de nulidad de contratos de estructurados y productos de riesgo suscritos con entidades bancarias.

 

Si crees que puedes ser un afectado por los llamados productos estructurados, no dudes en contactarnos sin ningún tipo de compromiso y te asesoramos en tu caso concreto.

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